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Han tratado de acabar con nosotros. Pero todavía estamos aquí. Y cada día somos más. Quizá tengan razón y nuestros sentimientos nos vuelven locos. Tal vez el amor es una enfermedad de la que tendríamos que curarnos. Sin embargo, hemos elegido un camino diferente. Y al final, esa es la mejor cura: ser libres para elegir. Ser
Delirium 1 (de 3)
Ediciones SM
448 páginas
ISBN: 978-84-6755-194-5
p.v.p: 15,95€
Tenía muchas ganas de publicar esta reseña porque la mayoría de las que he leído han sido más bien malas. Entiendo todas esas opiniones y sé a qué se deben, no obstante, mi caso ha sido diferente y he quedado muy satisfecha con el final de esta trilogía. Obviamente, me hubiera gustado que quedase más explicado (tengo la fe depositada en la autora para que algún día lo haga) y no dejándote la sensación de que le faltan hojas al libro, pero a pesar de todo, como os digo, no me ha decepcionado. La verdad es que esta reseña es más corta de lo que tenía pensado, pero es un libro en el que pasan muchas cosas y comentarlas sería totalemente spoiler.
La Lena que conocemos en Delirium no es la misma de ahora. Por motivos obvios sufre una gran evolución y se convierte en una chica segura de sí misma, más fuerte y con unos objetivos firmes por cumplir (todo lo contrario de la Lena de antes) y me ha encantado poder palpar esa evolución tan personal; la autora ha sabido llevarla muy bien. Por otra parte, el carácter de Lena me ha parecido interesantísimo; además, el poder desarrollarlo en esta sociedad distópica en la que el amor es considerado una enfermedad (
Del argumento poco puedo decir. Al tratarse de una tercera parte, casi todo lo que ocurre (por no decir todo) son spoilers, así que solamente diré que si habéis empezado con esta trilogía, no la abandonéis y os aventuréis con el final. A mí me ha encantado y son unos libros que recordaré siempre.
Para mí Requiem ha sido un final de trilogía inesperado pero satisfactorio, que recomiendo totalmente, al igual que Delirium y Pandemonium, sus antecesores; libros que atrapan al lector desde la primera página.
''Quien salta puede caer, pero también es posible que vuele.''
Una distopía que ha puesto el listón muy alto, que recomiendo con creces y que gustará a los amantes de la literatura juvenil.
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